Tras 12 horas de trabajo, la Empresa de Transmisión Eléctrica, S.A. (ETESA) culminó con éxito la intervención en la subestación Panamá para conocer las razones que desencadenaron el evento del pasado 20 de enero. Se identificó que había una conexión entre ambos lados de la subestación que no debía existir y se procedió a retirar el cable que estaba colocado de manera incorrecta.
"Todos los equipos de la subestación tienen un protocolo de protecciones en la casa de control para que ninguno sufra daños en caso que supere su límite de tolerancia, lo que vendría siendo como la caja de fusibles de un hogar que cuando hay un comportamiento inusual se disparan para que no se dañen los electrodomésticos", explicó Gilberto Ferrari, gerente general de ETESA.
"El 21 de enero, transcurridas las primeras 24 horas posteriores al evento, se comunicó dónde fue el incidente (interruptor 23B12), lo que faltó por definir fueron las razones por las que sucedió," manifestó Ferrari. "Debido a que enseguida se descartaron los tres protocolos por los que se deben activar las protecciones de ese interruptor, correspondía descartar dos teorías adicionales, pero debíamos realizarlas en el panel y manipular el sistema. Estas operaciones se deben hacer en día domingo, por ser el día de menor demanda de la semana, pero como había restricciones en la red los domingos anteriores por eventos en Panamá (JMJ) y en El Salvador (Elecciones) se hizo hoy (10 de febrero)", agregó el gerente de la empresa.
"Con los trabajos de hoy, se buscaba descartar dos hipótesis que faltaban por confirmar, una era que la apertura del interruptor fuera por un daño en el relé del equipo (lo que permite abrir y cerrar un circuito), lo cual se descartó", comentó Ferrari. "Y la segunda opción era que existiera una conexión entre el interruptor que falló y los equipos donde se realizaban las pruebas el domingo 20 de enero, la cual fue confirmada", añadió.
"Había un cable que no tenía por qué estar conectando ambos lados de la subestación, los cuales se hacen en pares precisamente para soportar la carga completa en caso de que uno de estos falle. Sin embargo, al estar ambos lados de la subestación conectados por un cable, actuaron al mismo tiempo causando la pérdida completa de la subestación", fueron las conclusiones de los trabajos realizados durante el día de hoy.
"Los cableados de las protecciones de ambos lados de la subestación fueron cambiados hace más de 15 años, por lo que se puede inferir que dicha conexión existía desde aquella época. Las condiciones para que las protecciones de ambos lados de la subestación se activaran al mismo tiempo nunca se presentaron antes de las pruebas del 20 de enero de 2019, por lo cual nunca se produjo la falla de la subestación", fueron las conclusiones de los trabajos realizados durante el día de hoy.
"El cable ha sido retirado, se han realizado las pruebas de ambos lados de la subestación y el sistema opera en condiciones normales", puntualizó Ferrari.
Los trabajos fueron imperceptibles para la ciudadanía pues no se presentó ninguna suspensión en el sistema de transmisión nacional operado por ETESA, durante el periodo que duró la investigación.
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